Enclavada sobre el mar en el mejor lugar de la Barra encontramos esta elegante residencia. Proyectada en un terreno de 1350  m2 con más 700 m2 de sólida y moderna construcción, desarrollada en tres niveles por ascensor, privilegiando la increíble vista al mar desde todos sus ambientes. Dobles alturas, anchos pasillos, cómodos espacios y una arquitectura racional e impactante, acompañada de una cómoda distribución, hacen de esta casa un ejemplo del refinado buen vivir.  Las espaciosas salas de estar, al igual que cinco amplias suites, cuatro de las cuales contemplan y reciben al mar, desde un lugar de privilegio.
Otro punto alto y de gran importancia es el diseño paisajístico. En el interior se integra a la arquitectura un cuidado jardín que se transparenta en los ambientes, dándole el toque de femenina naturaleza. En el exterior, en la zona de deck y piscina y como una prolongación del espíritu de la casa, gran jardín hacia el mar, diseñado con vegetación autóctona, con una doble función, la de embellecer y preservar la privacidad.
Con excelente orientación solar, su diseño vidriado le permite recibir las distintas postales del mar en cada momento del día. Sofisticadamente única.